jueves, julio 20, 2006
Revisar lo que le han escrito a Juan PabloDIA 120: EN LA VARIEDAD … ESTA LA COMPLEJIDAD
13:30 PM



Eventos destacables del día: Transferencias a 3 autos distintos
Querida familia y queridos amigos:
El Miércoles fue un día de descubrir, desde la visión de una silla de ruedas, lo poco preparadas que están la calles para que puedan circular con facilidad. En la última sesión tocaba transferencias y salieron junto con nosotros a una de las calles interiores de la Clínica, Alejandro, David, Nevenka, y Felipe. La bajada de la rampa de Urgencia fue fácil, pero la subida a la acera fue más compleja de lo esperado, pese a que tomó vuelo, pues estaba en subida. En nuestra normalidad de caminar no nos damos cuenta de estos detalles… Como no estaba el auto de Nancy, probamos en otro que fuese también alto, recayendo el honor en el de David. La prueba era de subir desde la acera al auto, ganando de este modo un poco de altura. Y vino el primer descubrimiento: no todos los autos tienen dos manillas para facilitar la tarea de Juan Pablo. Este era un Suzuki Vitara, y de todos modos pudo subir, con ayuda de Alejandro, pero el nivel de esfuerzo fue significativamente mayor.
Probamos luego en el de Nevenka, y tampoco tenía dos manillas, así que hizo sólo dos transferencias, las que debieron ser atendidas. Pasamos luego al Outback, en que usamos la tabla para deslizar, el cual tampoco tenía dos juegos de manillas. Así que mañana ya tengo tarea que es de agregarle una de manera que el esfuerzo de subirse sea similar al del auto de su mamá. En todo caso en el Outback el deslizamiento lo hace sin mayor problema y sólo requiere supervisión. La Coca, que llegó cuando estábamos todavía en el auto de Nevenka, comentó lo impresionada que estaba del avance logrado. De vuelta a la habitación un clásico: persecución en el pasillo para “embestir al viejo”. Me salvé por poquito… Al llegar a la habitación ya eran casi las 21 horas, por lo que hicimos de inmediato la cadena de oración con sus hermanos Coca, David y Alfonso, agradecidos al Señor de lo que habíamos presenciado y los avances que ha tenido.
La tilt fue hoy un motivo de cambio y de buscar despertar nuevas confianzas. Normalmente está sujeto con dos bandas a la tilt, la primera a la altura del pecho y la segunda cerca de las rodillas. Desde ayer la banda superior ha bajado al nivel del ombligo, que es un área en que no tiene sensibilidad, y la sensación de Juan Pablo es de desequilibrio creyendo que se va a ir de bruces. Así que pese a estar en 90º y soportar bien los 30 minutos, la ejercitación que estaba haciendo en la verticalidad se ha visto disminuida por este motivo. Como todo, es un tema de repetición y confianza en que logrará hacerlo.
En Rehabilitación en la mañana la exigencia se hace notar. Dice Juan Pablo que las auxiliares y las kine lo cuidan mucho, dado que se acerca el momento de partir a la casa (para lo cual aún no tenemos fecha definida), y no quieren que nada lo detenga de este fin. Además, lo siguen regaloneando harto. Ellas consolidan lo logrado a través de una familiar rutina: poleas, transferencias, ejercicios de brazos, aeróbicos lanzando una pelota, etc.
La cena de hoy fue nuevamente especial, de celebración de sus transferencias solo, en que hubo una ronda de sushi a la habitación 113 pedida por la Coca. De chatarra, comparado con la de ayer, no tiene nada, y con Alfonso le dieron el bajo muy rápidamente.
El día pasó velozmente y el rosario ha debido efectuarse en tiempos más personales, pidiendo como es usual la intercesión del Papa Juan Pablo II para que nos conceda la gracia de la recuperación de nuestro hijo.
Que Dios los bendiga
Lionel y Nancy